Un aspirante al puesto de cajero nocturno que ofrecía el Hospital Alemán de la Ciudad de Buenos Aires demandó a la institución por discriminación luego de no haber sido contratado al conocerse su diagnóstico positivo de VIH. La persona fue contactada mediante Linkedin, atravesó distintas instancias de entrevistas y luego debió realizarse el examen médico preocupacional, el psicotécnico y el examen ambiental. Producto de dichos estudios, la institución sanitaria tomó conocimiento del diagnóstico del aspirante, lo descartó de la búsqueda, y contrató a otra persona, pese a ésta estar peor rankeada que el demandante.
Si bien el Hospital asegura que el resultado de laboratorio no fue determinante para la contratación, el juez Ignacio Rebaudi, del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 22, que hizo lugar a la demanda, determinó que la institución “no ofreció ni produjo prueba que pueda permitir un análisis de esa decisión a los fines de desvirtuar la presunción de discriminación”.
De esta forma, Rebaudi condenó al Hospital Alemán a pagar una indemnización por daños y perjuicios de $1.950.000, una sentencia importantísima que marca un precedente judicial que pone un freno concreto a la discriminación en los ámbitos laborales contra las personas que tienen VIH.
«Esta sentencia es muy alentadora, porque es la primera que toma como fundamento la Resolución 270/2015 que habilita denunciar el test de VIH en el preocupacional y, además, porque le pone a los empleadores que discriminan en el acceso al empleo, un precio muy alto a pagar. Esperamos que pueda servir como herramienta para disuadir a las empresas que realizan estos test de manera ilegal», celebra Matías Muñoz, abogado, presidente de la Asociación Ciclo Positivo y coordinador para Argentina de la Alianza Mundial contra el Estigma y la Discriminación.
Discriminar no es gratis. Todas las personas tienen derecho a acceder a un empleo sin importar su diagnóstico.